Los 25 de mayo desde siempre que mi memoria me obliga a recordar, son esos interminables desfiles “cívico militares”, aun que eran mas militares que cívicos debo reconocer, en donde se veía a las fuerzas armadas desfilar y ostentando su poderío bélico y represivo: Sabíamos de lo que eran capaces de hacer estos individuos con estas armas, tanto afuera como dentro del territorio argentino.
Pero no gracias a Dios, ya que el no tiene nada que ver en lo que políticamente se hace en este país, las cosas fueron cambiando poquito a poco con la llegada de la democracia, así fue que las fechas patrias vieron, o comenzaron a ver, desfilar a algunas personas que el sistema quería ocultar o mejor no hablar de eso, así empezaron a marchar los soldados víctimas de la borrachera de Malvinas, algunos maestros de escuelas rurales vueltos del exilio y del espanto, a los empleados de fabricas con sus hijos; para que poco a poco la historia de los desfiles fuese cambiando para siempre en nuestro país.
Hoy en este 25 de mayo de 2010, fecha del bicentenario, del primer intento por ser nación, La gente copó las calles. El pueblo argentino, en su totalidad, con los marginados, los pueblos originarios, las mujeres en constante pelea contra el sistema, los jóvenes y los niños, todos ellos forman la masa de este suelo, esta muchedumbre interminables que es la que hoy por hoy desfila por las avenidas y las veredas repletas de sol de este histórico día, y no como en otrora época en donde los militares eran los dueños de las calles y también de nuestras fechas patrias.
Hoy es un nuevo PODER, un Nuevo Ejercito, el que es aplaudido desde los balcones, es otro ejercito el que vemos desfilar durante horas y horas por nuestras pantallas, es otra argentina la que se pasea por las calles, es el ejército del pueblo argentino, que ostenta la capacidad de cambio social, que dice en ese mensaje de alegría y compañerismo, que esta naciendo una nueva argentina codo a codo con mi vecino, el pueblo que dice somos la fuerza de poder construir un mundo mejor para todos nosotros sin raros salvadores .
Pero no solo las calles festejaron los nuevos aires, esas mismas calles cansadas de ser pisadas por botas militares, esas calles que hoy sienten las zapatillas que la acarician sin escuchar las MARCHITAS militares, para llenarse los oídos con la música que mucha veces nos prohibieron, la música de esos cientos de artistas populares, que hoy son los protagonistas de estas fechas tan importantes, esos mismos artistas proscriptos en otros momentos de nuestra historia, en donde el poder sonreír con inteligente intencionalidad estaba mal visto, y solo se nos permitían la mediocridad del club del clan.
Pero con los ojos empapados por ver a mi pueblo en las calles no pude dejar de pensar lo contento que seguramente estará Víctor Heredia, al ver en este día su banderín agitándose, frente a un ejército popular.
Me enacntó!! Siempre me hacés emocionar! seguí escribiendo porq trasnmitís mucha pasión! Besosss
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